Since Google announced the move of its servers from China to Hong Kong, Internet users and the media have been reacting. Throughout yesterday, hundreds of people came to Google’s Beijing offices to say goodbye to the American company. There were the most unconditional of the search engine, especially young people with studies, who came with candles, signs in favor of Google and flowers.

Muchos de ellos se juntaron allí gracias a Twitter, página censurada en China pero que ellos visitan sin problemas gracias a proxies o VPNs. “Las flores son un homenaje a Google”, comentó uno de ellos mientras las posaba debajo de la “G” del letrero de la entrada. Entre este grupo de gente, el apoyo a la empresa estadounidense era total, y varios de ellos pensaban que el buscador de Hong-Kong sería censurado completamente por el Gobierno en los próximos días. Entre los letreros que se podían leer, se daba las “gracias a Google por una información libre” y “confiamos en Google” (in google we trust).

Aún así, estos incondicionales de Google reconocen que son una minoría. “A la mayoría de la gente no le preocupa que Google se haya ido. O no saben por qué o no lo tienen muy claro”. Los que ayer se acercaron al edificio de la empresa, como muchos de los que han pedido tener voz en todo este culebrón, son usuarios aventajados que han convertido Internet en parte irrenunciable de su vida y que han aprendido a saltarse la censura.

En Internet, donde el tema está que arde en fórums, blogs y páginas webs, no parece haber término medio: u odio absoluto hacia Google, o amor incondicional. Los que están en contra de la empresa estadounidense critican su hipócrita intención de ganarse a la opinión pública occidental, el incumplimiento de las leyes locales y su falta de respeto por el pueblo chino (todo esto rociado con fuertes dosis de patriotismo). Los que apoyan al buscador lo ponen como ejemplo de empresa con principios y defensor de la libertad de expresión.

Como son muchos los comentarios y posts, voy a traducir los dos textos más interesantes que he encontrado y que además resumen muy bien por donde van las conversaciones en la blogoesfera china. El primero critica la decisión del buscador, el segundo la apoya:

Google se fue Por Wang Xinyu

Amigos, seguro que todavía estáis durmiendo, ¿verdad? [el post fue escrito a las 5:51 del 23 de marzo]. Google se ha ido. Ahora, si introduces en el buscador Google.cn, serás directamente dirigido a Google.com.hk.

Hay unas cuantas cuestiones sobre las que deberíamos reflexionar:

– Si quieres cerrar Google, ciérralo entero: ¿Por qué google.cn te lleva ahora de una forma tan clara y evidente hasta Hong-Kong? Se debe a que Google quiere hacer una muestra simbólica ante el mundo, mostrarle lo fuerte que es, mostrar cómo se atreve a enfrentarse a un Gobierno. Al mismo tiempo, es una trampa para ver cómo responde China. En el Google de Hong-Kong se pueden buscar temas sensibles que en la China continental no, con lo que Google está sacando a colación esta contradicción y esperando a ver si China hace algo y bloquea el Google de Hong-Kong. La empresa estadounidense muestra así que, a parte de “un país dos sistemas”, también hay “un país dos Internets”. Al mismo tiempo, Google ha instalado un sistema para monitorizar las circunstancias en las que los usuarios de la china continental acceden al Google de Hong-Kong, mostrando en qué momento y qué servicios están bloqueados. El propósito de Google está claro.

– Google es una empresa, y como tal siempre debe adaptarse a los intereses de sus clientes, no hacer lo contrario. Aunque el mercado de los buscadores en China esté dominado por Baidu, el mercado chino todavía sigue siendo muy importante para ellos. Que una empresa castigue a un país, que una empresa se enfrente a las leyes de un Gobierno… esto es la primera vez que pasa. Después de haber montado este espectáculo, igual todavía quiere volver. Últimamente se debate mucho sobre el “poder blando”, y esto es precisamente “poder blando”. Si no hubiera sido tocado por esa “aureola de divinidad”, ¿cómo podría sustituir las reglas básicas empresariales por sus principios ideológicos? Lo que quiere Google es mostrarse en la escena internacional. Ha provocado el descontento entre los internautas chinos, ¿a quién se van a dirigir estos ahora?

– Sin tener en cuenta si Google tiene razón o no, sin tener en cuenta nuestras propias dificultades, la salida de Google de esta manera provoca muchos problemas. No se trata de un problema de dar o quitar cara, sino de un problema de traición. No importa que mis compatriotas tengan problemas propios y estén disgustados, no deberían dejarse utilizar por Google. Nuestros propios problemas los resolvemos nosotros. Sin embargo, para los extranjeros, los chinos deberían tener todos la misma opinión. Si Google se va tranquilamente, tal vez respete a esta empresa. Pero a día de hoy, esta empresa no necesita mi respeto. Vamos a ver claramente cuál ha sido la diabólica mano detrás de la decisión.

Google, ya has montado tu numerito… ¿ahora qué? Yo sólo digo una frase: “Ya que te has ido, no vuelvas”.

Google se fue… ¿Y ahora qué?

Por Dengdai Yuyu [los paréntesis son del propio autor]

Mañana, los medios de comunicación centrales comenzarán su campaña de descrédito a Google (no lo digo yo, lo acabo de leer en un artículo).

Después, mucha gente va a comenzar a decir, “vete de aquí”. Si estás en este país, tienes que respetar las leyes chinas. Si no lo haces, ¡vete! (Pero yo quiero preguntar, ¿cuál es la ley que ha estipulado exactamente los términos prohibidos por la censura? )

Después, muchos más expertos analizarán el tema, diciendo que al salir del mercado chino Google se enfrentará a numerosas dificultades. También dirán que Internet en China es el más libre del mundo y que respetar las leyes es una práctica internacional (Expertos, ¿una práctica internacional? Te digo algo, a día de hoy, el capitalismo es la corriente principal del mundo y la democracia occidental es la práctica internacional. ¿Por qué no nos explicas esta tendencia internacional a los chinos?)

No somos nosotros quienes hemos echado a Google, es el mundo quien ha abandonado a China.

¿Tú puedes utilizar Twitter? ¿Puedes utilizar Facebook? ¿Y Youtube? ¿Qué hay de MSN? Dentro de poco no podrás utilizar Google. ¿Todavía estás contento?

Dices una y otra vez que amas a tu país, pero ésta es una idea patética. Yo creo que todos los chinos amamos a nuestro país, pero lo que amamos es el país, no a toda la gente o no a determinada gente. Si amo a mi país es porque nací aquí y probablemente vaya a morir aquí. Así que no estoy de acuerdo en ver cómo una determinada persona, o varias personas, insultan a mi país con el sólo objetivo de proteger sus intereses.

El patriotismo es la cáscara que protege al totalitarismo; el primero no provoca vergüenza, pero el segundo sí.

Según las leyes de China, en Internet no puede haber contenido para adultos (fíjate en las palabras que utilizo. El “contenido para adultos”, ¿qué es lo que tiene de no saludable? ¡Aquel que piense que no es saludable puede sencillamente no visitarlos durante toda su vida!) Pero aquí reconozco el problema: se hace bajo el eslogan de proteger a los niños, privando así a los adultos de su entretenimiento. Mientras, se hace a los niños cargar con una pesada carga de deberes y actividades escolares. Pero, ¿en qué parte de las leyes chinas se dice que en Internet se deben prohibir las noticias relacionadas con una persona sospechosa de cometer un crimen en Namibia?

Si la verdad es verdad, ésta no tiene miedo a enfrentarse con la mentira en un debate, porque durante los últimos miles de años la mentira nunca ha triunfado. Sin debate a lo largo de la historia de la humanidad, ¿como hubiera podido haber desarrollo? ¿El miedo a que se debatan diferentes ideas es por qué temes que éstas sean verdad? ¿Ver a un cerdo puede hacer a la gente tener tanto miedo como para convertirse en carnicero?

Pensar de esta forma tan sencilla es inútil, pero comprender la forma de pensar de mucha gente no es nada fácil. Echar a una empresa multinacional como Google se ha convertido inesperadamente en su mayor alegría. Es como coger yuanes chinos, tirarlos a la hoguera y después todavía decir que está bien porque dan calor. Este tipo de gente, o tiene mucho dinero, o en su vida ha visto un yuan. En resumen, así se ha ido Google. ¿Y ahora qué? Yo lo sé, tú también lo sabes. Pero no lo voy a decir, tú tampoco lo digas. Porque hay una cosa que se llama “cruzar la frontera” [en referencia a Hong-Kong].

Fuentes

► Google se fue, por Wang Xinyu (en chino).

►Google se fue… ¿Y ahora qué?, por Dengdai Yuyu (en chino).

► Los dos posts vienen de un portal llamado 一五一十部落 (my1510) donde se pueden encontrar piezas muy interesantes de varios blogueros chinos.